Hay muchas cosas que puedes hacer para conservar y proteger tu sonrisa. Una rutina sólida de salud oral lidera la lista. Pero, ¿conoces cuáles son los usos del flúor para cuidar tus dientes? En esta entrada de odontología para pacientes te contamos más.
¿Qué es el flúor?
El flúor es un mineral natural de la corteza terrestre. También es un componente de nuestros dientes y huesos. Con frecuencia se añade a los suministros de agua potable y a algunos alimentos. En especial, muchos productos de cuidado oral contienen flúor, como crema dental y enjuague bucal.
Por otro lado, otros usos del flúor incluyen:
- Como agente de limpieza.
- En pesticidas.
- En imágenes médicas.
- Para crear productos de aluminio, acero y teflón.
Funcionamiento del flúor
Los profesionales recomiendan el flúor durante la temprana infancia para fortalecer el esmalte dental antes de que los dientes salgan. Una vez los dientes brotan de las encías, las fuentes naturales de flúor reconstruyen el esmalte, que tiende a debilitarse durante este proceso.
En el caso de los adultos, el flúor es necesario para combatir las caries, entre otros usos.
Usos del flúor para cuidar los dientes
Estos son los principales usos del flúor:
- Reconstruir el esmalte dental debilitado, que a su vez ayuda a defender los diente de las caries.
- Desacelerar la pérdida de minerales en el esmalte dental, que conduce a su debilitamiento.
- Revertir los síntomas tempranos del deterioro dental.
- Prevenir el crecimiento de bacterias bucales dañinas.
De hecho, estudios recientes demuestran que el flúor de aplicación tópica (el presente en productos orales y en tratamientos de flúor) combate las caries en personas de todas las edades. Adicionalmente, puede ser útil entre las personas mayores para aliviar la resequedad bucal. Esta condición no es solamente molesta, sino que es un factor que favorece el crecimiento de las caries.
Tratamientos de flúor
Como mencionamos, es usual que las cremas dentales contengan flúor como un mecanismo de cuidado oral. Sin embargo, algunos adultos pueden necesitar tratamientos extra de flúor por tener un mayor riesgo de desarrollar caries. Estos pueden aplicarse en casa o en el consultorio de tu odontólogo.
Estos son los principales escenarios en los que se puede necesitar un tratamiento de flúor:
- Resequedad bucal por una condición médica, como la diabetes o el síndrome de Sjögren. También por el consumo de medicamentos que causen resequedad como efecto secundario. Este es el caso de antihistamínicos y otros medicamentos para las alergias, la hipertensión y la ansiedad.
- Encías retraídas o enfermedad de las encías. En especial, las encías retraídas dan más lugar a las bacterias, que a su vez aumentan el riesgo de desarrollar caries en las raíces de los dientes.
- Presencia de puentes o coronas dentales. Los bordes de los empastes y de las prótesis pueden alojar bacterias que conduzcan al deterioro dental.
- Uso de aparatos dentales, que hagan más difícil la limpieza correcta de la dentadura.
Los diversos usos del flúor para proteger los dientes son razón suficiente para utilizar productos que contengan este mineral. Estos pueden ser parte de la rutina diaria de higiene oral o de un tratamiento especializado. Consulta con tu odontólogo para determinar cuál es tu mejor opción para cuidar tu sonrisa.
Referencias
Cafasso, J. (2019). What Is Fluoride, and Is It Safe? Healthline. Recuperado de https://www.healthline.com/health/what-is-fluoride#TOC_TITLE_HDR_1
Colgate. (s.f.). ¿El flúor es bueno para los adultos? Recuperado de https://www.colgate.com/es-mx/oral-health/fluoride/can-fluoride-help-adults
Colgate. (s.f.). ¿Qué hace el fluoruro para proteger su sonrisa? Recuperado de https://www.colgate.com/es-mx/oral-health/fluoride/what-does-fluoride-do-0316